jueves, 23 de febrero de 2017

ACTIVIDAD 1. Adivina cuánto te quiero.

No conocía este libro ni tenía ni idea de su existencia pero en cuanto lo empecé a leer sentí que tenía que compartirlo para que se pueda enseñar a los niños.
He escogido “Adivina cuánto te quiero”  porque me parece una buena manera de invitar a los niños a expresar sus emociones, y aprender las  comparaciones como distinguir entre grande y pequeño, por ejemplo.
Entre otros premios, en 1996 obtuvo el otorgado por la American Library Association, y según la propia editorial, ha sobrepasado los 15 millones de ventas en todo el mundo, siendo publicado en 37 idiomas.

Este libro puede empezar leyéndose en aulas con niños más pequeños, 3-4 años, tan solo mostrándoles las imágenes a la vez que el maestro lee cada página, entonando de manera diferente lo que dice cada uno de los dos personajes.

Título: Adivina cuánto te quiero

Autor: Sam McBratney.

Ilustrador: Anita Jeram.

Editorial: KóKINOS.

Fecha 1ªedición: 1995.

Edad en la que me baso para realizar este análisis: 5 años, 3er curso del 2º ciclo de Infantil



Hablando de su manejabilidad, es un libro que será de fácil acceso para los niños, puesto que ya poseen buena psicomotricidad fina, por lo tanto pueden hacer uso del libro ellos solos.
El libro es de tapa dura con hojas resistentes a la fuerza de los niños y su tamaño es el adecuado para ellos, pues no es grande para ellos.

La portada es una ilustración muy dulce y familiar de Anita Jeram, quien a parte de ilustrar libros, también publica tarjetas de felicitación a través de Two Bad Mice Publishers Ltd.
Contiene una imagen en el centro en la que aparecen las dos liebres de color anaranjado, que son las protagonistas, la liebre grande y la pequeña, en un suelo de césped. 
La pequeña tratando de engancharse a las orejas de la liebre mayor.
Los colores de la portada son colores suaves, colores pastel, primarios y secundarios, reconocibles por los pequeños.
  


 Las ilustraciones aparecen en todas las páginas, la gran mayoría de las veces acompañadas por pequeños textos en el fondo que van relatando la historia.

En cuanto a la tipografía, son textos cortos con letra es muy legible.
Es la misma durante todo el libro (Times New Roman), haciendo uso de corchetes para separar lo que dice el narrador de lo que dicen ambos personajes.

Está todo escrito en minúscula excepto en la última página, que termina con dos palabras en mayúscula.

 Ahora hablando del contenido, el tema principal es la forma en la que demostramos el amor.

Como temas secundarios la competitividad al tratar de superar lo que la grande le dice, comparación de tamaños y distancias, de manera que el niño inconscientemente asentará todos esos contenidos.
Estos temas se adecuan perfectamente a la edad pensada ya que las características de los cuentos que mejor se asimilan son los que incluyen formas, tamaños, colores y números, los que tienen una trama con partes que se repiten.
 Los personajes son animales humanizados, la trama es sencilla y el desenlace del cuento es feliz.

La estructura es adecuada, es lineal, simple.
Durante todo el cuento se incluyen ilustraciones que ayudan a comprender el texto.
En el planteamiento la liebre pequeña le hace una pregunta a la grande, si adivina cuánto le quiere. En el nudo, comparan su amor con elementos de su alrededor tratando de superar al otro, e incluso a sí mismos. En el desenlace, la liebre pequeña se conforma con lo que dice, pensando que no hay nada mayor y entonces la mayor le supera una vez más.


El protagonista, es un animal humanizado, un personaje que, al igual que los niños que intentan las cosas hasta conseguirlas y no se rinde, puesto que desearía ser más grande, tener los brazos más largos, saltar más alto...
Sí se adecua a los lectores, ya que los niños muchas veces querrían ser mayores.

El valore de este cuento es el amor, y las ganas de demostrarlo
Contravalor no he visto realmente, pero sí la realidad de la limitación que tiene la liebre pequeña al ser de menor tamaño y no poder superar realmente a la grande.
En respecto al lenguaje, es tierno, familiar, sencillo.
Como figuras literarias podemos encontrar comparaciones durante todo el cuento, ya que compara su amor con diversos elementos y distancias.
Repeticiones, pues se repite la misma estructura durante todo el cuento.
Además el vocabulario es sencillo y adaptado a los niños de manera que les sea fácil su lectura.

Por último, como conclusión.
"Adivina cuánto te quiero" sí lo aplicaría en el aula con los niños pudiendo emplearlo para hablar del amor con la familia y con sus amigos.

También existe el cuento en forma de vídeo:



1 comentario:

  1. Bueno, Andrea, si has leído el cuento en inglés, sabes que la libre grande es "él" pero, en castellano, no se determina el sexo. Puede ser el padre, la madre, un hermano o una hermana mayor, el/la maestro/a, etc... No te cierres a un parentesco concreto y, de esta forma, los niños podrán identificar a cualquier adulto de su entorno.

    El tema principal no es exactamente el amor, sino la forma en la que demostramos el amor. Revísalo.

    La competitividad de la que hablas es un tema secundario.

    No hay acercamiento a la naturaleza. Simplemente se hace referencia al entorno en el que se desarrolla la historia. El niño, para expresar su cariño, se apoya en los elementos que hay a su alrededor. En una ciudad, usaría otros.

    No se trata de que el niño (receptor) asiente ningún contenido, sino que su forma de entender cada uno de los temas sea similar al que desarrolla el cuento. Eso es lo que tienes que argumentar utilizando fuentes fiables de psicología evolutiva.

    No comentas si la estructura es adecuada para los niños de esa edad.

    Explica mejor la identificación de los receptores con la liebre pequeña. Explica lo que comentas de la superación (¿?) y el deseo de ser mayor. Argumenta, con fuentes fiables, si eso es típico de los niños de 5 años.

    Explica también si los valores y contravalores son propios de esa edad. Revísalos porque yo no veo ni confianza, ni paciencia y tampoco veo lo de las ganas de superarse... simplemente veo ganas de demostrar que es el ganador de esa preciosa competición de cariño.
    En cuanto al tamaño como contravalor... pues es una realidad, pero no un contravalor. No hay nada negativo en ser pequeño.

    Un texto literario nunca es un recurso. Es una obra de arte con valor en sí mismo.

    No veo que este libro dé pie a hablar de las mascotas... un alto porcentaje de álbumes de imágenes usan a los animales como personajes ¿cualquiera vale para hablar sobre las mascotas?

    La última línea de tu análisis no pinta mucho ahí y, cuando leas el bloque 3, verás realmente cómo deberías trabajarlo.

    Incluye la bibliografía que uses para argumentar la adecuación de cada aspecto a la edad de los receptores.

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